El rabo de toro de mi niñera

CUIDADO CON PEDIRLE EL CHUPETE A LA NIÑERA.

Y es que la atipa calza el mismo número que el mismísimo Rocco. Madre mía como se a puesto el servicio… A la que te descuidas o se tiran a tu mujer o te comen el rabo mientras te enculan… Esto no es lo que era…

Hay un mundo diferente, exótico, realmente curioso y, sobre todo, atrapador, que el porno se ha ocupado de exhibir en todo su esplendor. Erecto esplendor. Es el universo trans.

Cada aparición de una nueva estrella de este género inquietante pone de manifiesto hasta qué punto la sexualidad puede hacernos pasar momentos perturbadores.

En este caso aparecen cinco genuinas hembras de poderío exultan, caderas prodigiosas. Pecho perfectos y rostros osados y que llaman a todos los pecados. Felizmente, esos pecados se cumplen, y con todo detalle para satisfacción del adorador exigente del género.

En este caso, cuando la entrega ha llegado al número 15, queda claro que hay mucho público para el género de modo que el pretexto es que estas muñecas con grandes rabos son las niñeras de los chicos de unos caballeros que proponen un poco más de dinero si, además, se ocupan de su sexualidad… transgresora.

La primera de ellas es Holly Sweet y con ella el tipo desea probar cosas nuevas porque con su mujer la sexualidad es anodina. Y el hombre busca una falta absoluta de prejuicios. Y comienza el espectáculo. La hace vestir con una ropa reveladora, la desnuda, la manosea, le habla describiendo lo que siente y al cabo de unos momentos los dos tienen el rabo duro, expuesto y a punto de felación profunda.

El padre morboso es el que mama primero y la cámara se regodea en el detalle mientras ella le ordena qué hacer porque le encanta tener el mando.
Gran felación que ella retribuye con una gran pericia, largamente, con manos y labios y lengua, con él recostado primero, de pie después, con la trans de rodillas ofreciendo su mejor performance.

Los papeles se intercambian hasta que llega el momento de la penetración, deliberadamente postergada, y la sodomía de ida y vuelta florece ante la lente ofreciendo todas las posturas y una creciente exaltación del más profundo sexo anal, en perra, en misionero, con continuos mete y saca y entonces, habiendo recorrido todos los caminos que llevan al interior de las nalgas.

Con ella penetrada y él penetrado comparten el momento de la eyaculación como genuinos camaradas de un vicio que, seguramente, proseguirá mientras…
¿los niños necesiten una babysitter?

Bien, digamos que esta es solamente la primera secuencia de una película que no tiene desperdicio. Sobre todo cuando aparecen las lujuriosas mulatas de rabos prepotentes para repetir con los caballeros desprejuiciados todas las danzas anales que hacen florecer al planeta trans.

Reparto:
Sheeba Starr Angela Bratz Carmen Moore Holly Sweet Morgan Bailey